¿Qué le pasa a tu vulva en la menopausia? 

Índice: 
¿Cómo cambia la vulva en la menopausia? 
Así se debe cuidar la vulva en la menopausia 
Tratamientos para mejorar la salud de nuestra vulva en la menopausia 

Cuando hablamos de la menopausia, la atención suele centrarse en los cambios hormonales y en síntomas habituales o más conocidos como los sofocos, el insomnio o la alteración del estado de ánimo. Sin embargo, nuestra vagina y nuestra vulva también experimentan cambios importantes durante esta etapa de la vida a causa de la disminución de estrógenos. 

A menudo se tiende a tratar igual toda la zona íntima de las mujeres, pero es importante distinguir la vulva de la vagina porque no es lo mismo y no requiere exactamente los mismos cuidados. Conocer en profundidad cómo es la anatomía de nuestros genitales y cómo se ven afectados por la menopausia, puede ayudarnos a reconocer los síntomas y a mejorar nuestra higiene íntima.  

La vulva es la parte externa y visible de los genitales femeninos, que incluye los labios mayores, los labios menores, el clítoris y el vestíbulo vaginal, entre otros. Mientras que la vagina es el conducto muscular interno que conecta la vulva con el útero. 

Aprendemos con la Dra. Francisca Molero, sexóloga especialista en menopausia de máxima, qué síntomas son normales en la vulva durante la menopausia, cómo cuidar esta parte importante de nuestro cuerpo y cuándo deberíamos consultar a un médico especialista en salud vulvar. 

¿Cómo cambia la vulva en la menopausia? 

Los cambios hormonales que implica la menopausia, especialmente la reducción de los niveles de estrógenos afecta directamente a nuestra piel y a los tejidos de la vulva y eso se traduce en una serie de cambios en la vulva para algunas mujeres. 

Estos son los cambios vulvares más habituales en la menopausia:  

• Sequedad: la vulva, al igual que la vagina, puede volverse más seca debido a la disminución de la lubricación natural. La falta de estrógenos reduce la producción de las secreciones que ayudan a mantener esta área bien hidratada. Algunas mujeres sienten durante la menopausia ciertas molestias vulvares, picazón e incluso una mayor predisposición a la irritación por el roce con la ropa interior o durante las relaciones sexuales. 
• Pérdida de elasticidad: los tejidos de la vulva pierden mucha elasticidad con el paso del tiempo, y este proceso se acelera inevitablemente en la menopausia debido a la menor producción de colágeno. Esta pérdida de flexibilidad puede hacer que la piel de la vulva se note mucho más frágil y tirante. 
• Disminución de la sensibilidad: algunas mujeres notan en la menopausia una reducción en la sensibilidad de la vulva, especialmente en la zona del clítoris, lo que puede afectar su vida sexual. 
• Cambios en el color y textura de la piel: es bastante común que la vulva experimente cambios en su apariencia durante la transición menopáusica. Desde un oscurecimiento o despigmentación de la piel hasta el adelgazamiento de los labios que puede hacerla más propensa a sufrir pequeñas heridas. 
• Atrofia vulvar: o atrofia genital:, es un proceso por el que los tejidos vulvares adelgazan, se secan y se vuelven demasiado sensibles, predisponiendo la zona a infecciones por la alteración de la barrera protectora de la piel. La atrofia vulvar suele ser incómoda para las mujeres y, en algunos casos, bastante dolorosa.  
• Vulvodinia: aunque es menos común, algunas mujeres pueden desarrollar vulvodinia, que se caracteriza por un dolor crónico en la vulva que no responde a una causa clara. Cuando existe dolor persistente, es necesario consultar con un médico para buscar un diagnóstico y tratar el problema de forma adecuada. 
  

Aunque muchos de estos cambios son normales durante la menopausia, en raras ocasiones pueden aparecer otras alteraciones en la vulva como bultos, lesiones o cambios bruscos en la textura de la piel. Estos síntomas podrían ser indicativos de problemas más graves que requieren atención médica inmediata.  

Así se debe cuidar la vulva en la menopausia 

Tal y como explica la Dra. Francisca Molero, sexóloga especialista en menopausia de máxima, si queremos mejorar nuestra vulva y vagina saludable y funcional es muy importante tener conciencia genital, “las mujeres sabemos el malestar que nos comporta la falta de confort genital. Nos sentimos muy incómodas cuando notamos escozor, irritación o picor, y mucho más cuando nos molesta al tener relaciones sexuales”.  

En la menopausia nuestra vulva y vagina está más sensible y requiere más cuidado. Mantener una buena higiene y cuidados específicos para la vulva durante la menopausia es esencial para prevenir molestias y mantener una buena salud genital. 

Consejos expertos para el cuidado adecuado de la vulva en esta etapa: 

• Usar jabones neutros y suaves: durante la menopausia, la piel de la vulva puede ser más sensible, por lo que es necesario evitar productos de higiene íntima que contengan perfumes o químicos agresivos. Lo recomendable es usar jabones específicos para la higiene íntima, que no alteren el pH natural de la zona y que sean respetuosos con la piel y con la mucosa vulvar. 
• Hidratación regular: cuando existe sequedad vaginal, lo más adecuado es aplicarse de forma regular hidratantes tanto vaginales como vulvares específicos para la zona. Además de ayudar a aliviar los problemas de sequedad, ayudan a prevenir irritaciones. 
• Evitar las duchas vaginales: las duchas vaginales alteran el equilibrio natural de la flora vaginal y pueden causar irritaciones en la vulva.  
• Ropa interior adecuada: el uso de prendas demasiado ajustadas o de materiales sintéticos favorece la acumulación de humedad y puede causar irritación en la vulva. Mucho más recomendable es usar ropa de algodón, ya que permite la transpiración.   
• Cuidado con la depilación: la piel de la vulva durante la menopausia es mucho más sensible, por lo que la depilación de la zona debe ser poco agresiva y espaciada. 
• Hidratación y nutrición general: una dieta equilibrada y una buena hidratación son fundamentales para favorecer la salud de la piel y mejorar la elasticidad y el estado de los tejidos en la menopausia.  
  

Tratamientos para mejorar la salud de nuestra vulva en la menopausia 

Cuando los cambios en la vulva se vuelven demasiado incómodos o dolorosos, es urgente buscar soluciones. En máxima, encontrarás un equipo de especialistas en menopausia que ofrecen un diagnóstico preciso y el tratamiento más adecuado para tu situación. 

Para mejorar tu salud vulvar, existen diversos tratamientos que pueden ayudarte:  

• Hidratantes vaginales: usar periódicamente hidratantes vaginales y vulvares para aliviar los problemas derivados de la sequedad en la zona. Los hidratantes vaginales pueden ser de tipo no hormonal o de tipo hormonal. 
• Lubricantes: para mejorar la comodidad en las relaciones sexuales, se recomienda usar puntualmente lubricantes que no alteren el ph vaginal. 
• Terapias hormonales locales: en algunos casos de sequedad y atrofia vulvar se recomiendan los tratamientos con estrógenos locales en forma de cremas, óvulos o anillos vaginales.  
• Láser vaginal o radiofrecuencia: el láser o la radiofrecuencia estimulan la producción de colágeno en los tejidos de la zona vulvar, mejorando su elasticidad y humedad natural. 
• Terapia con ácido hialurónico: los tratamientos a base de ácido hialurónico en la zona vulvar ayudan a mejorar la hidratación y elasticidad de los tejidos. 
• Fisioterapia del suelo pélvico: el fortalecimiento del suelo pélvico ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la zona vulvar, de manera que se reducen los síntomas de sequedad y se mejora la respuesta sexual.  
• Salud sexual: mantener la vulva y la vagina en condiciones adecuadas es fundamental para garantizar el confort y la funcionalidad necesarios para disfrutar de la sexualidad en solitario o compartida. Según explica la Dra. Francisca Molero, mantener una actividad sexual periódica mejora la salud y la calidad de vida de las personas. “En ocasiones, cuando las molestias vulvovaginales son crónicas acaban impidiendo que las mujeres puedan disfrutar de su sexualidad y de su deseo. En máxima atendemos a todos estos problemas relacionados con la sexualidad y las relaciones”. 

REFERENCIAS:  

1. Cambios en la vulva y vagina durante la menopausia [Internet]. MedlinePlus. 2024 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/004016.htm 
2. Consejos para la higiene íntima [Internet]. Instituto de la Menopausia. 2024 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.institutodelamenopausia.com/divulgacion/consejos/salud/como-debe-ser-la-higiene-intima-en-la-menopausia 
3. Salud vulvar en la menopausia [Internet]. Quirónsalud. 2024 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.quironsalud.com/blogs/es/ellas/salud-vaginal-menopausia#:~:text=La%20mayor%C3%ADa%20de%20las%20mujeres,s%C3%ADntomas%20sin%20tener%20relaciones%20sexuales 
4. Cambios vaginales [Internet]. Breastcancer.org. 2024 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.breastcancer.org/es/efectos-secundarios-tratamiento/menopausia/tratamiento-sintomas/cambios-vaginales 
5. Sexo en la menopausia: tratamiento de los síntomas [Internet]. Instituto Nacional sobre el Envejecimiento (NIA). 2024 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://www.nia.nih.gov/espanol/menopausia/sexo-menopausia-tratamiento-sintomas 
6. Libro para jóvenes – Asociación Española para el Estudio de la Menopausia [Internet]. AEEM. 2022 [citado el 23 de octubre de 2024]. Disponible en: https://aeem.es/wp-content/uploads/2022/10/n1870_libro-jovenes-aeem-04-05-20-baja12.pdf